Un portavoz de Woody Allen y su esposa Soon-Yi Previn distribuyó el domingo 21 a la prensa una declaración en respuesta a la serie documental Allen V. Farrow, de HBO, que ha reabierto el caso por presunto abuso sexual del cineasta sobre su hija adoptiva Dylan. La serie, de cuatro capítulos, repasa desde el punto de vista de la familia de la actriz y expareja de Allen, Mia Farrow, las acusaciones y posteriores exoneraciones del director, y expone la historia de la hija de ambos en primera persona, pero sin ofrecer una réplica del acusado. “Estos documentalistas [los directores Amy Ziering y Kirby Dick] no tiene interés en la verdad. En cambio, han pasado años colaborando subrepticiamente con los Farrow y sus facilitadores han elaborado un trabajo crítico plagado de falsedades”, comienza la declaración.
La serie se estrenó el pasado domingo. Según el portavoz, Allen y Soon-Yi fueron consultados hace menos de dos meses para ver si querían responder a las acusaciones. “Les dieron pocos días para hacerlo. Por supuesto, declinaron hacerlo”, explica. “Como se ha sabido durante décadas, estas alegaciones son categóricamente falsas. Múltiples agencias las investigaron en su momento y encontraron que, sea lo que sea que Dylan Farrow puede haber sido hecho creer, ningún abuso tuvo lugar. Es triste y nada sorprendente que la cadena que emite esto sea HBO, que tiene un contrato con Ronan Farrow [hijo de Allen y Farrow y uno de los periodistas que destapó las acusaciones de abusos contra Harvey Weinstein]. Aunque esta pieza de pacotilla pueda llamar la atención, no altera los hechos”, finaliza el texto. Ronan Farrow habla en el documental como hijo de Allen y Farrow, pero no ejerce de productor ni este documental es uno de las producciones por las que ha firmado con HBO.
Allen y Farrow fueron pareja durante 12 años (rodaron juntos otras tantas películas en ese tiempo). Aunque no vivían juntos ni se casaron adoptaron dos niños, Dylan y Moses, ambos ya eran hijos adoptivos de Farrow, y tuvieron otro biológico (Ronan). Moses recientemente publicó una extensa carta acusando a su madre de un trato difícil. En 1992 Farrow descubrió que Allen tenía una relación con su hija adoptada Soon-Yi Previn y ese mismo año la actriz acusó a su pareja de habe abusado de Dylan, de 7 años. Saltó una guerra, con varias investigaciones de por medio y dos exoneraciones de Allen en sendas investigaciones judiciales. El cineasta siempre se ha defendido diciendo que Dylan fue entrenada por su madre para hacer esas alegaciones después de conocer su relación con Previn (con quien está casada desde 1997).
El documental usa extractos de la versión en audio de la autobiografía de Woody Allen, A propósito de nada. La editorial estadounidense, Skyhorse Publishing, alertó el lunes que HBO ha usado esos trozos, leídos por el propio Allen, sin permiso. “El primer episodio de Allen V. Farrow usa sin permiso más de tres minutos de nuestra edición de audiolibro de A propósito de nada. Entendemos que el resto de episodios [no emitidos todavía] usan de forma similar sin autorización el audiolibro. Esta evidente apropiación de la propiedad intelectual del señor Allen es un incuestionable incumplimiento del copyright”, reza un comunicado de la editorial.
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