Un Llamado a la Privatización del Sector Energético en México: La Propuesta de Eduardo Verástegui
En un momento crucial para el futuro energético de México, Eduardo Verástegui ha hecho un fuerte llamado a abrir el sector energético del país a la inversión internacional. A través de mensajes en sus redes sociales, el político opositor ha planteado la privatización de Petróleos Mexicanos (Pemex), una empresa estatal que él considera una carga financiera para el pueblo mexicano.
Verástegui, quien ha sido un firme representante de Trump en México, defiende que privatizar Pemex no solo es una opción viable, sino un camino necesario para “salvar” al país. Asegura que la actual situación de la empresa, que se ha convertido en la más endeudada del mundo, limita el financiamiento para áreas críticas como hospitales, escuelas y seguridad. Según sus palabras, “cada peso que se le da a Pemex es un peso que no llega a esos servicios básicos”.
El ex actor subraya que el petróleo debería estar en manos de empresas privadas, operando con reglas claras, licitaciones transparentes y una competencia real. Su visión apunta a que esta apertura no solo traería inversión y empleo, sino que también resultaría en una reducción de los costos energéticos para los mexicanos.
En un tono que invita a la acción, Verástegui ha hecho un llamado a los “patriotas mexicanos” para unirse a su nuevo partido político, Viva México, destacando que todos tienen un papel que desempeñar en la construcción de una nación más fuerte. “El sueño mexicano no se impone: se construye”, afirma, dejando claro que la colaboración es clave para avanzar.
A este mensaje se suma la reciente cena privada que organizó con el nuevo embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson, donde el diplomático lo llamó “hermano”, sugiriendo una conexión que podría tener implicaciones en la política internacional y energética del país.
El argumento de Verástegui se apoya en la historia, al recordar un período en el que México generaba más empleos e inversiones en sus regiones petroleras, cuando esta actividad estaba más abierta a capitales privados, como en el caso de la Compañía El Águila, con inversión británica.
Este contexto revela la necesidad de un debate en torno al futuro del sector energético en México, un tema que continúa generando opiniones polarizadas y que será crucial para el desarrollo económico y social del país en los próximos años.
A medida que se continúan escuchando voces tanto a favor como en contra de la privatización, se vuelve imperativo seguir de cerca la evolución de este tema, que puede marcar un antes y un después en la historia reciente de México.
Esta nota contiene información de varias fuentes en cooperación con dichos medios de comunicación




























