A un año de iniciada, la pesadilla parece no tener fin, y los famosos vaya que tampoco la han pasado bien con la COVID-19.
El mundo está cumpliendo un año de vivir una pesadilla espantosa, una pesadilla de la cual quisiéramos todos despertar y decir: “¡Sólo fue un mal sueño!”. Desafortunadamente no es así, y no será así.
Recuerdo cuando decíamos que estas semanas o meses que duraría la pandemia serían difíciles para todos, pero nadie imaginó que un año y lo que nos falta, NADIE, ¿o sí? Muchas son las voces que se han levantado en torno a este virus, desde las autorizadas, hasta las de locura generalizada que dicen y aseguran que nadie debe vacunarse porque nos quieren gobernar a través de la vacuna.
Todos esos me encantaría que fueran a los hospitales COVID, donde miles de mexicanos, cerca ya de 200 mil, han fallecido, que escuchen los testimonios de personas que simple y sencillamente dejaban de respirar, y vieran las secuelas del mismo, tremendas, desgarradoras, increíbles e impensables.
Pero, ¿cómo han enfrentado nuestros grandes artistas mexicanos esta pandemia? Aquí les va: Primero vamos con los que han perdido la batalla en contra de esta enfermedad, como Yoshio, don Armando Manzanero, Raymundo Capetillo, Cecilia Romo, Lucía Guilmáin, Óscar Chávez, por mencionar sólo algunos.
Cada caso fue distinto, diferente, muy particular; por ejemplo, Yoshio fue internado por un problema estomacal y su familia nunca más lo volvió a ver; don Armando Manzanero se infectó en un viaje para celebrar su cumpleaños, lo internaron con un pronóstico reservado y a los cuatro días murió.
Cecilia Romo luchó como pocos en contra de esta enfermedad, cerca de cien días en coma hasta que perdió la lucha; Lucía Guilmáin falleció sin enterarse de que lo había contraído.
Los vacunados son ya varios famosos.
Enrique Guzmán hizo largas filas para que le aplicaran la vacuna y salió muy emocionado, incluso hasta las lágrimas… Y cómo no, si el señor no se quiere morir.
Doña Silvia Pinal, a su avanzada edad, también tuvo la suerte de ser vacunada, aunque su hija menor, Alejandra Guzmán, acaba de ser reportada como positiva.
Crisis económicas, emocionales, financieras y familiares son el pan nuestro de cada día, pues producciones televisivas, sets de filmaciones y teatros han dejado de trabajar, al grado de que actrices como Lolita Cortés han declarado que, de seguir así la situación, ella podría hacer limpieza en casas para sobrevivir.
Otros más, como Ricardo Hill, viven en una gigantesca depresión. Unos más reportan que sus ahorros ya no alcanzan, como Carlitos Espejel, Benito Castro y Los Mascabrothers.
Y por último, les comento que con todo lo que he relatado, y me quedo muy corto con la aplastante realidad, critican a Juan José Origel por pretender salvar su vida y vacunarse en Miami. Cada quien tiene una opinión muy particular al respecto.
Moraleja: Tarde o más tarde llegará a nosotros la vacuna; una vez que estemos a salvo no sólo regresaremos a la normalidad, a abrazarnos y querernos, sino también volverán nuestros favoritos: ¡LOS ESPECTÁCULOS!
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Esta nota contiene información de varias fuentes en cooperación con dichos medios de comunicación.
