Un juez federal con residencia en Cancún, Quintana Roo, otorgó una suspensión provisional contra la orden de aprehensión a Florian Tudor, “El Tiburón”, presunto líder de la llamada mafia rumana o Banda de la Riviera Maya.
Desde marzo pasado un tribunal de Bucarest libró una orden de aprehensión contra el rumano, al aceptar la solicitud de arresto preventivo de la Dirección de Investigación del Crimen Organizado y Terrorismo (DIICOT).
Al enterarse que es buscado, Tudor tramitó un amparo contra cualquier orden de aprehensión y este martes el juez Julio César Ortiz Mendoza, titular del Juzgado Octavo de Distrito con residencia en Cancún, Quintana Roo, le concedió la suspensión provisional contra la deportación, la aprehensión y otros actos privativos de la libertad.
La fiscalía rumana le imputa a Tudor delitos de intento de asesinato, chantaje y constitución de una red de delincuencia organizada, hechos por los que seis de sus colaboradores fueron condenados a penas de entre tres y 10 años de prisión.
En marzo pasado, el rumano se reunió con la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Icela, de manera privada en sus oficinas para atender la solicitud del ciudadano de origen rumano, de ser escuchado por las autoridades del gobierno de la república.
La SSP informó que durante la reunión se le dio fecha de la garantía de audiencia ante la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a la cual no asistió.
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A Tudor se le señala de haber alterado cajeros automáticos en la Riviera Maya, en Cancún, Sayulita, Puerto Vallarta, y Tijuana, para robar datos de tarjetas de crédito de turistas y retirar dinero de sus cuentas.
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