En la zona de Observatorio, las obras inconclusas ocasionaron un colapso y un gran perjuicio económico para los habitantes del lugar. El problema se está presentando en la construcción del nuevo distribuidor vial, el cual fue prometido desde hace más de diez años, pero que nunca se concluyó debido a la falta de interés y eficacia por parte de las autoridades.
Esta situación ha generado un gran caos vehicular y afectado gravemente a los comerciantes de la zona, quienes han visto disminuidas sus ventas hasta en un 50%, debido a que los accesos a las puertas de sus negocios están cerrados y no tienen ningún tipo de entrada para sus clientes.
Adicionalmente, los vecinos de la zona ya no saben qué hacer debido al constante ruido y el polvo generado por las maquinarias las cuales están laborando las 24 horas del día.
No obstante, una de las más grandes preocupaciones de los ciudadanos es la inseguridad que ha aumentado en la zona por el abandono de las obras de construcción.
El colapso de las obras inconclusas en la zona de Observatorio es un reflejo del abandono de las autoridades a las problemáticas de la ciudad. Urge una pronta solución para evitar mayores daños económicos e inseguridad para los habitantes de la zona.
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