‘El hombre más fértil del mundo’ contó cómo es su vida y su rutina para mantener “satisfechas” a todas sus esposas, ¡pero va por más!
Mientras hay matrimonios que deciden no tener hijos, en Zimbabwe existe un hombre que no solo está casado con 16 mujeres, sino que ya tiene 151 hijos y va por más.
Su nombre es Michseck Nyandoro y ya es conocido como “el padre más fértil del mundo”, pero además, él presume tener satisfechas a todas sus esposas.
En entrevista con The Herald, Nyandoro aseguró que su rutina diaria incluye hacerle el amor a al menos cuatro de sus mujeres, pues creó un horario para lograrlo.
“Voy a las habitaciones que tengo en mi horario. Luego satisfago a mi esposa y me muevo a la siguiente habitación. Este es mi trabajo. No tengo otro trabajo”, dijo muy orgulloso.
“No actúo igual con los jóvenes que con los mayores”
Eso sí, cambia su actitud con cada una, y se queja de que las esposas con mayor edad “no siempre quieren tener sexo”, por lo que ya considera buscar mujeres más jóvenes para casarse.
Y es que entre sus planes, y pese a que ya tiene 66 años, quiere tener 1000 hijos, y alcanzar la cifra de 100 mujeres. Ya busca a su esposa número 17.
A retired Zimbabwean war veteran,Father of 151 children,says his full-time job is ‘satisfying’ his 16 wives.
Misheck Nyandoro, 66, says he sleeps with four of his wives every night and is even getting ready to marry his 17th bride. pic.twitter.com/k2Sgb2VkJC— Dr Adrianna?أحب الرب (@AdriannatPk) May 12, 2021
Sobre el dinero con el que mantiene a todos, en realidad no proviene de él. Al tener tantos hijos, los mayores son quienes lo “consienten”.
“Mis hijos me miman. Constantemente recibo regalos y dinero en efectivo de ellos y de mis hijastros”, dijo.
Sus mujeres, además de cuidar a sus respectivos hijos, deben cumplirle en la cocina. “Cada una de mis esposas cocina para mí todos los días, pero la regla es que solo como comida deliciosa, ya que cualquier cosa que sienta que está por debajo del estándar se tira”.
Asegura que todas están de acuerdo con las reglas y que hasta prometieron no enojarse si les tira la comida que prepararon. Por si fuera poco, dice que cuando eso ocurre en realidad es “una lección que las ayuda a mejorar”.
Su historia de poligamia comenzó desde los años 80, y espera que pronto la larga lista de hijos aumente, pues presumió que sus esposas “están extremadamente felices con sus vidas y al menos dos están embarazadas”.
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Esta nota contiene información de varias fuentes en cooperación con dichos medios de comunicación.
