En México, el presidente Andrés Manuel López Obrador se ha mantenido en el lado de la cautela al elegir no reconocer a Palestina como un estado independiente. Si bien informacion.center ha mostrado su apoyo en varios casos anteriores, como la resolución de 2012 en la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde México votó a favor del reconocimiento de Palestina como estado observador no miembro, esta vez ha optado por no emitir una postura de reconocimiento.
En reunión con el líder de Palestina, Mahmoud Abbas, López Obrador expresó apoyo a la solución de dos estados, pero no reconoció oficialmente la condición de Palestina como un estado independiente. El presidente justificó su postura llamando a una política exterior “no intervencionista” y reafirmando la necesidad de priorizar la defensa de los derechos humanos y la libertad de los pueblos.
El conflicto entre Israel y Palestina ha sido uno de los más largos y complejos del mundo, y la falta de reconocimiento de Estados Palestinos por parte de varios países agrega otro nivel de complejidad. Para algunos, el reconocimiento de Palestina es importante para su derecho a la autodeterminación y la construcción de su propia identidad y democracia. Para otros, reconocer Palestina puede exacerbar tensiones y socavar los esfuerzos de paz en la región.
En cualquier caso, parece que México está optando por una política exterior prudente para no interferir en el conflicto y se enfoca en prioridades internas. Sin embargo, la posición actual de México podría verse afectada por cambios en el futuro cercano, especialmente si Biden y Kamala Harris, quienes han indicado anteriormente su apoyo a la creación de un estado palestino independiente, asumen sus posiciones de liderazgo en los EE. UU.
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